Portavoz de Exteriores del PP
Gustavo de Arístegui: "La confianza en España vuelve a estar bajo mínimos"
Nacido en Madrid el 6 de junio de 1963, ha sido director general del Gabinete del Ministro del Interior (1996-2000); del Consejo de Política Exterior del Partido Popular; del Comité Ejecutivo Provincial de Guipúzcoa y Ciudad Real, y del Comité Ejecutivo Regional del Partido Popular del País Vasco. También ha ejercido de diputado en las Legislaturas VII, VIII y IX y ocupó el puesto de vocal de la Comisión de Cooperación Internacional para el Desarrollo. De Arístegui pertenece a la delegación española en la Asamblea Parlamentaria de la OTAN.
Portavoz de Exteriores del PP
Gustavo de Arístegui: "La confianza en España vuelve a estar bajo mínimos"
El portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, veía absurda la presencia de nuestras tropas en Kosovo, por lo que considerarla decisión del Gobierno llega tarde. Además, califica de catastróficas las condiciones y la manera en que se ha tomado la decisión del repliegue, que según dice han puesto de manifiesto el grado de descoordinación del Gobierno, además de la poca fiabibilidad y seriedad que España tiene como aliado. Según sentencia, desde 2004 nuestra política exterior es un desastre.
-¿La presencia española en Kosovo había dejado de tener sentido?
-Desde el día siguiente de la declaración bilateral ilegal de independencia de esa provincia secesionista. Es absolutamente evidente que a lo mejor la comunidad internacional consideraba que era necesario que hubiese allí presencia internacinal, pero creo que es lo que se puede y se debe exigir a los que han tenido esa idea es que manden las tropas los países que han reconocido a Kosovo, que no se exija a quienes no lo han reconocido que manden tropas porque es absolutamente absurdo y no tiene ningún sentido de ser. La decisión tendría que haberse tomado hace más de un año cuando se produjo la secesión.
-Lo que ha quedado de manifiesto es el grado de descoordinación que existe en el Gobierno...
-La decisión llega tarde, pero a medida que se va sabiendo en qué condiciones y cómo se ha tomado la decisión de la retirada no podemos por menos que decir que es un verdadero y completo disparate. El fondo es el correcto, las formas son absolutamente catastróficas: Descoordinación entre Defensa y Exteriores; descoordinación entre la Presidencia del Gobierno y el resto del Gobierno; descoordinación con el resto de los aliados; la irritación profunda que se ha generado en diferentes partes del mundo... Y es que no se ha avisado a tiempo y no se ha dicho por qué cuando hay razones sobradas de gran solidez.
-¿Tendrá consecuencias negativas esta apresurada retirada? El Gobierno de Obama ya ha expresado su decepción.
-Muy probablemente. La retirada ha generado un enorme malestar en la comunidad internacional y también en el Gobierno de EE UU. No sé cuáles podrá tener, pero desde luego no ha sentado bien en ninguna parte. Más que por el fondo por las formas porque todo el mundo sabía que un país que no reconoce a otro no podía estar garantizando el bienestar y la independencia de ese país. Es un disparate en toda regla, se mire por donde se mire. Nadie puede exigirle a España permanecer, podían exigirle la solidaridad en las cosas, como está mandado.
-¿Vuelve a estar bajo mínimos la confianza en España?
-Sí. Vuelve a estar bajo mínimos. España es un aliado poco fiable y poco serio. Dice una cosa y hace otra. De repente dice que se retira en cinco meses, pero después son doce; un miembro del Gobierno contradice a otro...
-¿Cómo valora la política exterior del Gobierno de Zapatero?
-La política exterior de este Gobierno desde 2004 es un desastre. Ha habido cierta mejora respecto de las actitudes algo más críticas respecto de Hugo Chávez, pero muy poco. A este Gobierno le falta coherencia y solidez y tiene una política exterior muy de izquierdas, muy radical, muy poco equilibrada y poco seria.
Rosalina Moreno
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