Exterior de una tienda de Vodafone. | Efe
TELEFONÍA | Fibra óptica
Orange, Vodafone y Jazztel negocian unificar sus inversiones en redes de fibra óptica para poder competir con Telefónica en las nuevas ofertas de Internet ultrarápido, según avanzó hoy el consejero delegado de la filial de France Telecom en España, Jean Marck Vignolles.
Con el marco regulatorio ya claro, después de que la CMT aprobase en enero la legislación definitiva para la comercialización de Internet hasta 100 megas, los operadores alternativos han comenzado a estudiar cómo competir con la empresa que preside César Alierta en estos nuevos servicios que llevarán a los hogares la televisión en alta definición, entre otras novedades.
"Existen discusiones interesantes con otros operadores alternativos sobre la compartición de redes", afirmó Vignolles en un encuentro con la prensa celebrado en París con motivo del Día del Inversor de la compañía. Según el directivo, la inversión para poder ofrecer velocidades de Internet superiores a 30 megas es "tan grande" que estaría justificado la entrada en el grupo de más operadores de telefonía.
Llevar un cable de fibra hasta una casa tiene un coste próximo a 1.000 euros, tres veces más que la instalación de una red de ADSL como la que millones de españoles ya utilizan en la actualidad para navegar por internet, según las cifras que maneja el sector. Sin embargo, contar con esta tecnología será esencial para la supervivencia de los operadores en el futuro por lo que Telefónica ya ha comprometido una inversión en estas redes de 1.000 millones de euros entre 2007 y 2010.
Compartir... hasta 30 megas
Por su posición de operador dominante, el regulador ha exigido a la multinacional que comparta esas nuevas redes con sus competidores en velocidades de hasta 30 megas, pero las telecos saben que pronto los usuarios demandarán mucha más capacidad de Internet en sus hogares para poder disfrutar de la gran variedad de contenidos digitales y servicios que las nuevas tecnologías han desarrollado.
Orange y Vodafone ya cuentan con un acuerdo de inversión conjunta en telefonía móvil en España para alcanzar poblaciones de menos de 25.000 habitantes con una red 3G, que permite navegar con el teléfono. Con este pacto, la filal de France Telecom ahorra más de 70 millones de euros en su red española, según datos ofrecidos por el director financiero de la compañía, Gervais Pellissier.
El difícil entorno macroeconómico ha obligado a los operadores a buscar nuevas formas de ingresos y ahorro para sobrevivir a la caída del consumo. Además de la compartición de redes, Orange está llevando a cabo otras medidas para mejorar su rentabilidad. La compañía, que ayer anunció un crecimiento de sus ingresos en móvil y fijo de 0,4 y 4,3% respectivamente, ha anunciado que recortará el número de proveedores y centros de atención al cliente que tiene en España.
Para buscar nuevos clientes, Orange abre entre 7 y 8 nuevas tiendas de marca propia en todo el país con el objetivo de alcanzar 300 puntos de venta en 2011. El pasado año, la operadora recortó 400 empleos netos en España y no espera anunciar nuevos despidos si sus "ingresos continúan creciendo", afirmó Vignolles.
Por otra parte, los directivos de la compañía descartaron la posible compra de Ono y Yoigo. Según el director financiero, el precio del operador móvil puesto en venta por Telia Sonera es muy elevado en comparación con el millón de clientes que tiene en España y sus pérdidas netas.
"El foco ahora es el crecimiento orgánico. No hay ganas de inversiones significativas", afirmó Vignolles en referencia a estas dos posibles operaciones
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