STIGLITZ CREE QUE EL 17,3 % DE PARO EN ESPAÑA ES "CUESTIÓN DE MALA SUERTE"

GURÚ ECONÓMICO DE ZAPATERO
Stiglitz cree que el 17,3% de paro en España es "cuestión de mala suerte"


Joseph Stiglitz, ideólogo del programa económico de Zapatero y premio Nobel de Economía aplaude en una entrevista en ABC al presidente español, discrepa con Krugman y dice que nuestra economía tiene muchas posibilidades. Sobre el paro, "cuestión de mala suerte".
Joseph Stiglitz, ideólogo del programa economico que Zapatero presentó a las últimas generales. (Archivo)

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Strauss-Kahn también ve "brotes verdes" en la economía

2009-05-17

(Libertad Digital) La entrevista que ofrece este domingo el premio Nobel de Economía de 2001, Joseph Stiglitz, en el diario ABC resulta llamativa aunque poco sorprendente. Este profesor de la Columbia Business School, que formó parte del grupo de ideólogos que inspiraron el programa electoral que presentó el PSOE en las pasadas generales, discrepa en las páginas de ABC de su colega keynesiano y también premio Nobel Paul Krugman y hace afirmaciones tan sesudas como que el abultado problema del paro en España es cuestión de "mala suerte".

¿Para cuándo la recuperación?

Quizá por un esfuerzo de simplificar sus argumentos a fin de que sean más comprensibles, Stiglitz despliega una capacidad de análisis un tanto curiosa. Preguntado por cuándo terminará la recesión en EEUU, Stiglitz explica que "ya hemos tenido mucho crecimiento negativo, así que la gran pregunta es cuándo tendremos crecimiento positivo y eso no ocurrirá ni en 2009 ni en 2010".

Pero sigue dando pronósticos y señala que "tocaremos fondo este año o a principios del que viene" con lo que, en su opinión, la recuperación podría llegar en 2011. En cambio, cuando se refiere a España el discurso cambia radicalmente.

El paro en España, mala suerte

ABC interroga a Stiglitz sobre las impresionantes cifras de paro que registra nuestro país, donde ya se destruye más de un millón de puestos de trabajo al año y cuya tasa de paro (17,36%) es más del doble que la media de la Unión Europea con más de 4 millones de parados. En cambio, aquí Stiglitz, se limita a señalar que se trata de "una cuestión de mala suerte".

Como ya hizo Zapatero, culpa del paro al volumen que ha adquirido la burbuja inmobiliaria en nuestro país en los últimos años. En cualquier caso, Stiglitz no cree que la burbuja se haya pinchado aún ya que señala que uno de los retos más duros que tiene España es el de "romper la burbuja inmobiliaria". Con todo, la venta de pisos permanece paralizada, las obras iniciadas están detenidas, y ha sido el sector que más trabajadores ha arrojado al paro durante la primera fase de la crisis (esa que tanto tiempo ha negado Zapatero).

Aplaude a Zapatero

Sobre nuestro país ha señalado que, pese a las dimensiones que ha adquirido la crisis y la crudeza de la situación y el sangrante problema del desempleo, tenemos que estar satisfechos porque "la política pública es mejor en España que en EEUU, a pesar de las altas tasas de paro". Además, señala que "España debería darse cuenta que de no haber tenido esas buenas regulaciones y un gobierno tan responsable fiscalmente, estaría mucho peor".

Sobre las medidas adoptadas por Zapatero, estima que el presidente español "ha logrado manejar la política fiscal" y ha lamentado que "muchos de los instrumentos para hacer frente a la crisis no están a su disposición". En su opinión, lo importante es proveer de crédito a la inversión pública.

Discrepa e Krugman

Después de aplaudir la actuación del gobierno español sobre la crisis, ABC le pregunta a Stiglitz si, entonces, discrepa con Paul Krugman quien recientemente dijo en un foro en el que participó junto a Zapatero que le aterraba la economía española. Afirmación a la que respondió Zapatero regalándole una copia de su Plan E.

Stiglitz no tiene ningún empacho en reconocer que discrepa de su colega keynesiano y premio Nobel. Al igual que Zapatero, Stiglitz opina que "hay aspectos dinámicos en la economía española que a largo plazo irán bien". Según él es necesario que los españoles invirtamos más y nuestro "gran objetivo" debe ser "la expansión de la inversión".
Sobre el sector turístico, Stiglitz cree que hay que dejarlo a la suerte ya que se trata de un "sector muy cíclico" por lo que "hay poco que España pueda hacer por sí mísmo más allá de esperar a que los países emisores de turistas se recuperen". El hecho de que los precios de algunos sectores turísticos sean considerablemente más bajos que el nuestro, no parece ser razón, para Stiglitz, de que el flujo de turistas se esté desviando a destinos más económicos como Croacia.