Medicina antienvejecimiento
Es probable que ustedes hayan oído hablar de este tipo de medicina o de productos cosméticos, nutricionales o de otra índole que llevan denominación de antiaging, antiedad o antienvejecimiento. La vedad es que a todos nos interesa sentirnos más jóvenes y vitales, evitar enfermedades y estar en plenitud de facultades a pesar de que pasen los años. La medicina antiaging es aquella rama de la medicina que se encarga de la prevención de los procesos del envejecimiento (enfermedades, achaques y discapacidades) antes de que éstos aparezcan de modo que consigamos vivir con buena calidad. Hay que aclarar que no existe ningún producto comercializado que demuestre que se puede alargar la vida. Esto puede cambiar en los próximos años ya que la investigación en el campo de la longevidad es muy activa.
La persona más longeva documentada vivió más de 120 años lo que significa que nuestro potencial biológico nos debe acercar a esas edades si tratamos adecuadamente nuestro cuerpo y nuestra mente. Este sería por el momento el objetivo segundo de la medicina antiaging, siendo el primero alargar el período de buena calidad de vida.
¿Qué es el envejecimiento?
El envejecimiento es el acúmulo de agresores sobre los componentes fundamentales de la vida (material genético, proteínas, lípidos y glúcidos) que a partir de cierta edad exceden los mecanismos de reparación del propio cuerpo haciéndoles muy susceptibles a infecciones y otras enfermedades.
¿Se puede modificar el envejecimiento?
Se conocen algunos de los pasos metabólicos que no llevan a la vejez y por tanto podemos actuar sobre ellos retrasando el proceso. Algunos ejemplos serían:
• La lucha contra los radicales libres mediante antioxidantes y una buena alimentación.
• La lucha contra los descensos de niveles hormonales mediante suplementos y ejercicio físico
• Lucha contra la debilidad inmunológica mediante complejos multivitamínicos o minerales.
¿Cuáles son las bases actuales del tratamiento contra el envejecimiento?
• Una nutrición pobre en grasas saturadas y en azúcares refinados y rica en fibra, productos del huerto y pescado.
• Evitar los productos tóxicos como el tabaco o el alcohol en general aunque una copa de vino tinto al día puede ser saludable.
• Practicar ejercicio físico un mínimo de 3-4 veces por semana (unos 30 minutos al día y de carácter moderado al inicio). El ejercicio más intenso nos elevará los niveles hormonales con efectos rejuvenecedores.
• Potenciar la actividad intelectual y sobre todo tener ilusión por algo. No hay que encerrarse, hay que salir a la calle, relacionarse y participar en diversas actividades.
• Medicina preventiva convencional. Un chequeo al año nos ayudará a detectar aquellos factores de riesgo que hay que corregir (hipertensión arterial, colesterol, diabetes, etc...) lo cual nos puede dar un el diagnóstico precoz de ciertas enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares permitiendo su tratamiento con mayores garantías de éxito.
• La genómica. El estudio de los polimorfismos genéticos se realiza mediante un sencillo examen de saliva dándonos información sobre cómo prevenir muchas enfermedades de un modo muy precoz y sin precedentes en la historia familiar.
¿Qué otros medios son aplicables en este tipo de medicina?
Cualquier medio o especialidad sea convencional o de procedencia alternativa, que esté demostrado que se puede administrar de forma segura y con buenos resultados. Cada paciente es distinto y el especialista es el que debe decidir en cada caso el tratamiento personalizado. Ejemplos de productos que se pueden emplear son: los antioxidantes, productos hormonales y medicamentosos convencionales, vitaminas, cofactores, fitoterapia, homeopatía, acupuntura y ozonoterapia entre otros.
¿Por qué se necesita este tipo de medicina?
En 1900 un 1% de la población mundial tenía más de 65 años. En 2000 un 10% superaba los 65 años y se estima que en 2050 un 20% superará los 65 años. Las expectativas de vida de la generación de los nacidos entre los años 50 y 65 serán de alrededor de los 95 años y los sistemas sanitarios de los distintos países serán incapaces de hacer frente económicamente a este fenómeno. No olvidemos que en España la seguridad social se creó cuando había muchos jóvenes y poca gente mayor. Es decir, mas vale que empecemos a ponernos en forma para el futuro porque sólo nosotros podemos resolver nuestros propios problemas económicos ligados a la longevidad.
¡Hay que vivir la vida al máximo porque es el don más preciado que se nos ha dado. Pongámonos manos a la obra!
Dr. Javier Güell Peris
Cardiólogo del Centro Médico Teknon. Barcelona
Fellow of the European Society of Cardiology
Director del Instituto Antiaging Dr.de Benito. Centro Médico Teknon. Barcelona
No hay comentarios:
Publicar un comentario